sábado, 27 de julio de 2013

Ninis está harta de que la arrastre a lecturas, exposiciones, presentaciones de cosas 'aburridas'. Cruzo la frontera hacia Tijuana y escucho a su intuición decirme una de esas preguntas que son órdenes:

–We are going straight to Rosarito, verdad?
–Quizá.

Manejo al centro cultural porque hay un festival de poesía y quiero ir a ver qué, nomás porque me queda de paso y capaz que algo me gusta y todas esas cosas que me digo para convencerme de hacer algo que seguramente me va a decepcionar. Me desvío y llego al estacionamiento.

–Wait, what are we doing here? your 'quizá' never means what I think It means. Why are we here?
–Vamos al Cecut a una cosita, no tardaremos mucho.
–I don't want to, I want to go home and write on my typewriter. Let's gooooooooo, pleeeeeease!

En el estacionamiento intento distraerla como hacía cuando era chiquita, vamos por el suterráneo. Un hombre con vestuario teatral camina en la dirección de mi carro:

–Mira, ahí viene un señor con un traje chistoso.
–Oh, mom. Can't you see? he's Shakespeare.
–Oh, he is...
–I hate to come to the Cecut––inicia su estrategia para convencerme de salir de ahí––and if Shakespeare is leaving it means the festival is over. There can't be a festival without Shakespeare, Let's go home.
–Nos vamos a quedar, vamos a escuchar una cosa de poesía, nomás un ratito...––Ninis no me escucha, sabe que no hay remedio, la arrastraré a una de esas cosas que odia. No me permite hablar más.
When we are born we cry because we come to this great stage of fools.  William Shakespeare.
–¿Y eso qué? ¿Tú cómo sabes eso? ¿De dónde lo sacaste?
–Virtual Families, when a baby is born they put a quote underneath the pictures... or when they get a promotion or they die.


viernes, 26 de julio de 2013

Qué ganas de meroliquear, poeta. Qué ganas de proclamar a La Poesía como la respuesta.

Entiéndalo: no me interesa la fecha en que escribió su texto gacho, tampoco me interesan sus referencias a "The Day After Tomorrow."

Mi expresión no es de admiración ni de asombro, es de desconcierto estético.

Escribe usted feo y lee peor, poeta.

Sus metáforas apestan. Las comparaciones deben morir en segundo de secundaria ¿nadie le dijo? Sus recursos literarios son más pobres que mi imaginación.

Permítame un consejo: siga escribiendo y guarde todo debajo de la cama, si la suerte está del lado de La Poesía en la que usted se revuelca con tanta faramalla,  a su muerte nadie conocerá sus textos, poeta.

martes, 23 de julio de 2013

4 Plums, 4 bananas, 2 pears, 2 white peaches, 1 mango.

$30 pesos, Rosarito rifa.
When I was little you had to chose: cholo, surfo, vaquero, fresa. In Rosarito there was no other choice if you wanted to belong to a group. And you could only be a fresa if your parents had money, so for many of us that was out. You could be a vaquero, but you needed access to a horse, a ranch or if you were a girl, a boyfriend with a horse or a ranch or at least a pair of boots and a belt with a big buckle. I was afraid of horses, and boots and all that, so that was out for me, as well. I had a bunch of friends who surfed, but they were machitos who would say that the ocean was not for women. The easiest thing to be was a cholo, anyone could be a chola, but there was always fist fighting involved and hating, and slow dancing to oldies, and hours in front of the mirror getting eyeliner on and fixing up a huge mess of hairspray, and when you were done you would be called a "haina" by some guy with a handkerchief on his head and half closed eyes, so that was out for me too. I had no group, so I became a nerd instead, the only thing you could be without having social support of any kind.

(I am writing an article about surfing, and it dawned on me that I never adhered to a group of any kind. It was an easy thing to do for a man, but not if you were a woman, en fin. I am in desperate need of fruit. Deliro, lo sé)

lunes, 22 de julio de 2013

–Mira, la señora de las plataformas azules camina como payaso astillado.

sábado, 20 de julio de 2013

Sabes que estás pirata cuando te parece que un camión reverseando frente a tu ventana (foquitos amarillos, listones rojos colgando de las antenas, ruido rasposo de motor) es la cosa más fabulosa en el mundo.


Sabes que estás _________ cuando te parece que un camión reverseando frente a tu ventana (foquitos amarillos, listones rojos colgando de las antenas, ruido rasposo de motor) es la cosa más _____________ en el mundo.

Sabes que estás _________ cuando te parece que un camión ______________ frente a tu ventana (__________________________________________________________________________) es la cosa más _____________en el mundo.

lunes, 15 de julio de 2013

Siempre me ha parecido una estupidez la goma de mascar pero hay momentos en que me llega el deseo de tener en la boca la sensación dolorosa del azucar procesado quebrandose en los terrones de un chicle barato, de sentir que por mi nariz sube el sabor artificial que sólo puede compararse con el aroma de un  detergente de manzana o de plátano mezclado con los desechos tóxicos asoleados de una fábrica de plásticos en un arroyo clandestino de aguas residuales.

¿Sabe usted de lo que le hablo?

(Si alguna vez probó los chicles "Motita" de plátano o los dulces "Jolly Rancher" de manzana y si alguna vez pasó por el arroyo Huahuatay en cualquier verano de finales de los '90, sabe perfectamente de lo que le hablo)

(por favor, haga de cuenta que estos paréntesis no existen)


Mis certezas desayunan dudas. Y hay días en que me siento extranjero en Montevideo y en cualquier otra parte. En esos días, días sin sol, noches sin luna, ningún lugar es mi lugar y no consigo reconocerme en nada, ni en nadie. Las palabras no se parecen a lo que nombran y ni siquiera se parecen a su propio sonido. Entonces no estoy donde estoy. Dejo mi cuerpo y me voy, lejos, a ninguna parte, y no quiero estar con nadie, ni siquiera conmigo, y no tengo, ni quiero tener, nombre ninguno entonces pierdo las ganas de llamarme o ser llamado.

(La pálida, de un señor don Eduardo Galeano)

viernes, 12 de julio de 2013


Esta mesa huele a sal de gusano. Hay un plato de mango a medio comer y un par de tea lights consumidas. Hay mucho menos de la tercera parte de una botella de vino, también hay hormigas y en el suelo quieren rodar  un par de calcetines grises de rombos naranjas, verdes, azules. El teléfono casero sigue vivo. Desde aquí pienso en el otro lado, desde allá pienso en este. Es un ejercicio en el que juego con la gravedad, la identidad, la lengua, el movimiento, la frontera, el clima, el modo de encender la estufa y el de hacer un alto frente al semáforo.

(En este momento una hormiga acaba de cruzar la pantalla)

Hace unas pocas semanas descubrí que siempre fui la loca de la familia, la loca del pueblo, la loquita de la colonia, la loca de la escuela. Así ocurrió hasta que conocí otra gente, grupos de locos entre quienes soy una mujer perfectamente convencional que encaja en estándares y que lleva una vida normal. La conciencia de la locura me regresó la otra noche que me encontré al padrino de lazo de mis padres y me dijo que él me recordaba muy bien, que yo estaba loca y que él también y que por eso yo lo entiendo.

miércoles, 10 de julio de 2013

Ahora recuerdo los nudos en la panza (a veces vuelven sin razón conocida).


lunes, 8 de julio de 2013

Yo, vestida de Papa.

Un gran pez agonizante.

Muchos pececitos sin escamas, sin ojos, suaves, algunos muertos color camarón.

(mis vecinos de apartamento gringo discuten después de escuchar música de alabanza y electropiano)