martes, 28 de octubre de 2003

No se puede entender un pais en una semana, menos cuando lo que se conoce es casi unicamente la capital.
Llegué con la idea de que los cubanos vivían prisioneros rodeados de mar en una especie de Alcatraz caribeña, salí con la idea de que asi como mucha gente quiere irse, la gran mayoría no quiere abandonar su lugar. Hay carencias, muchas, pero toda la gente tiene donde vivir, toda la gente come, no se ven homeless ni drogadictos pidiendo para el fix.

La prostitución (masculina y femenina) abunda, eso si. El primer día que caminé por la Habana Vieja aprendí a deshacerme de los jineteros con la palma extendida y la mandibula apretada, yo iba a trabajar, no a oir historias tristes, que para dramas con los mios basta.
No le regale nada a ninguna persona que me pidiera. Preferí regalar las cositas que llevaba a las personas que me pareció tenían más necesidades, lo fascinante es que hubo quien se nego a recibir mis regalos, o hasta una propina. Y que al contrario, prefirieron hacerme un regalo a mi antes que aceptar cualquier cosa a cambio.

Ahora no se que pensar, cuando estaba alla, estaba harta, lo único que quería era ver a mi hija y que Lou me abrazara para dormir, la home sickness me ataca hasta cuando voy a Tijuana. Ahora que lo veo desde acá creo que fue un buen viaje, no se me antoja volver sola, ahora quisiera que Lou fuera conmigo (nunca hemos viajado juntos), además de que lo pondría en contacto directo con las artesanos y tabaqueros, lo obligaría a que me ayudara a cargar bolsas.

Lo que si duele es tener caja fuerte en la habitación, tele con treinta canales, cantidades ilimitadas de papel sanitario, agua, toallas en forma de cisne esperando en la cama, aire acondicionado y luego ir (sola, como me atrevi?) a un hoyo húmedo y oscuro donde seis negros sudorosos tratan de venderme una caja de cohiba falsa.
Continúo en la recuperación.

Hoy me quede dormida viendo "la virgen de los sicarios", desperté media hora más tarde con nieve en la tele y el gusto del hummus que había comido un rato antes. Al despertar no sabia nada, ni donde estaba, ni que hacía ahi, nada, tuve que hablar para saber que idioma hablaba. Trate de reconocer mi colcha sin lograrlo, el lapso me duró un par de minutos. Aunque me dio un poco de pánico me gustó la idea de no tener memoria.

lunes, 27 de octubre de 2003

En esta ocasión no hice diario de viaje, me alejé del internet y no leí ni el Granma. El jet lag no me dejó en paz por tres dias, me dedique a lo que iba: nada de paseos, puro negocio.

Tabaco, artesanía, visita a las plantaciones de tabaco, contacto con artistas y ya, nada de turismo sight seeing. Un par de horas de playa, quince minutos de alberca (los últimos antes de volver) tres horas de hacer maletas y ochenta kilos de equipaje. Yo creí que iba a descansar, me engañé, volví mucho más cansada que cuando me fui, pero al menos puedo decir que tengo mercancia.

Además sali en las noches, bebi cristal, bucanero, bavaria, mojitos, daiquiris y una bebida que era como un brandy alexander con sabor a menta.

El jazz cafe quedaba a media cuadra de mi hotel.

El último día vi la puesta del sol desde mi ventana, sólo entonces se me quitó lo norteada.

Jose (asi se pronuncia, sin acento en la e), serigrafista del taller Portocarrero me guió pacientemente, me ayudó a cargar tiliches y me llevó a los restaurantes que le gustaban a él. Comí delicioso.

El útimo día su mamá me preparó arroz, frijoles con puerco, calabaza y papa, cerdo grille, tomates frescos con betabel (ella le decía remolacha). Su esposa me hizo un café cortado que me hizo aguantar la noche completa (el avión salía a las cuatro de la mañana de la hora nueva).

Eloisa, madre de Alonso Mateo (pintor cubano radicado en DF) me hizo llorar.

No sé que más, ah si, mi sentido de la moda quedó por el suelo, no me quite mis converse en todo el viaje, los usé con falda, shorts y pantalones por igual, con calcetines pa que no me sacaran ampollas.
Como no sé que decir del viaje, transcribo una carta que acabo de enviar.


Volví el domingo pasado.

Gran confusión, dos.

1. Cuba es un país difícil de comprender.

2. La postal que te envié tiene código postal de Rosarito ( creo), me hice bolas, automáticamente puse el mio en vez del tuyo.

Vi el incendio desde el cielo, el sol rojo y un fantasma reflejado en el mar. El avión tuvo que ir al mar y virar sobre las islas coronado para realizar el aterrizaje.

Creo que me hice amiga de gente digna ( no jintereos(as): Claudia una tapatía a quien salve del acoso de unos negrotes, Jose Eduardo, serigrafista que tenia tu sonrisa y un poco de tu voz o más bien de tu modo de decir algunas palabras ( mi nombre por ejemplo). Eloísa Mateo, periodista retirada que habla bajo cuando quiere quejarse de algo.

Fui a la final del beisbol ( Cuba contra Panama), me encanto. Vi pasar el carro de Fidel. Me quedé sin un sólo dolar(literalmente). Vi al vecino que me acompañaba como dos dias en el viaje ( y eso que teníamos la misma habitación). Los jugadores de beisbol se quedaban en el mismo hotel que yo, seis del equipo japones me atacaron a besos en un elevador en la euforia de la medalla de bronze. Fui a las plantaciones de tabaco (vegas).

En el juego de beisbol un hombre oscuro como su oficio (soldador) me explicaba lo que ocurría, porque como puedes imaginar yo y el beisbol no tenemos mucho en común, era de Tacotaco, Pinar del Rio. Al salir del monticulo el pitcher de Panamá, la gente gritaba: "uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho, nueve, diez... fuera!", yo pensaba que le contaban los pasos así que le pregunté al de Tacotaco a que se debía el conteo, me respondió que era la cuenta de knock out en el box.

No te aburriré con más detalles pero te aseguro que ahora soy una traficante de tabaco profesional, lo que hago lo se hacer y muy bien.

Beso. ( si no te llega la postal en un mes dime, no se por que (quiza porque me gustó) compre dos.

L.

Pd. Gano Cuba.

martes, 14 de octubre de 2003

No le se a esta compu.



tiene acentos áéñúóíñÑÑ;;..,,¿?

lunes, 13 de octubre de 2003

miércoles, 8 de octubre de 2003

I learned to speak english thanks to my favorite T.V show: Married with Children.

Ok. I also sell cigars to tourists, and I must speak english to them. My husband is mexican american so we speak english and spanish, but that has nothing to do with the way I learned the language.

I know my english is poor, but I'm proud to say that I was taught by the best teacher a student can have: Al Bundy.

If someone hasn't noticed, Married with children is on at midnight, channel 6.

Once, in 1993 I met Bud Bundy (David Faustino), he was really short, had very bright blue eyes. He was on vacation in Rosarito, It's the only time I have asked for an autograph (lie, I also asked profesor jirafales for his autograph).

Hay que leerlA
Tambien a elMO.
Esta semana he sido ama de casa.

He preparado guisos, construí un disfraz de cenicienta, aspiré el tapete, he lavado los trastes sin chistar mientras oigo el radio de la cocina.

No he querido ver la compu.

I've been too good. Alguna culpa cargo.
El viaje a La Habana tuvo que posponerse porque murió el papá de mi travel companion.

Nunca antes habia tenido que psoponer un viaje teniendo los boletos en la mano.

Consideré irme sola, tanto así, que llegue al aeropuerto con mi maletota llena de dulces, jabones y cepillos de dientes. Ya no queria irme pero decidi que si la aerolínea no hacía válidos los boletos para otra fecha, entonces me iría sola. Afortunadamente no fue necesario y durante alguna semana de este mes me iré, no quiero ni pensar cuando. Un dia de estos.


finally, it works.

viernes, 3 de octubre de 2003

Mañana a las 18:15 sale el avión que me llevará a La Habana.

Hace mucho que no viajo, poco más de tres años. Me sorprende no sentir la más mínima emoción.

Lou y Ninis se quedan una en las manos del otro.

Desafortunadamente siento que me quiere atacar un resfriado.

Ayer quise hablarle a algún amigo pa contarle que me voy, después de un rápido recuento no encontré a quien.

miércoles, 1 de octubre de 2003